Recuerdo aquella ocasión en la cafeteria de un céntrico lugar lujoso; entró un hombre muy bien vestido y pidió un Capuccino Helado, después de un buen rato llegó el mesero con la sencilla orden del cliente, en forma casi indiferente, desapercibida y mediocre de servir!! Al momento de pedir la cuenta, aquel hombre tan distinguido saca un billete al parecer de 200 pesos y le dice al mediocre muchacho.. "gracias por el servicio aqui está tu propina". el mesero se desbarataba de gratitud en ese momento, "que buen dia, exclamó".
Poco tiempo después y no por casualidad entra nuevamente aquel imponente caballero, de inmediato el mesero que lo atendió anteriormente corre a recibirlo y casi tropezando y con palabras entrecortadas da la bienvendida a tan selecto y espléndido cliente. El esmero, la elegancia y el buen trato prevalecieron durante la estancia de este hombre; para finalizar, llega el momento esperado por todos y más por el mesero, "la cuenta joven por favor".. corriendo y nervioso el mesero, saboreando la mas jugosa de las propinas del día, entrega la nota, pero oh sorpresa!!!!! solo quedaron como cambio unas simples moneditas que se aplicarian a la propina; indignado y furioso el mediocre mesero al canza al cliente a las afueras de la cafeteria y exclama: "perdone Señor, pero me acaba de humillar con su propina, me he esmerado en atenderle como usted merece, no le parece injusto? " El elegante Caballero sorprendido pero risueño responde: "mire usted joven; la propina de la vez pasada, fue por sus servicios del dia de hoy" y las moneditas de hoy, por la atención de la vez pasada".. ESTO SIN DUDA PARA REFLEXIONAR!!
